top of page
Cazador de rastros salvajes
Buscamos la compañía de alguna representación animal, acaso por su ausencia sobre el pavimento, en él apenas pasean las fauces domesticadas de perros y gatos, roedores de cloacas. Quizá es por esta ausencia que abundan las representaciones, algunas de ellas francamente pueriles y caricaturizadas de un mundo otrora salvaje, un oso blanco anuncia panadería y refrescos, en tanto que un tigre enculcora el desayuno. Por suerte, fuera de la publicidad sobreviven rastros salvajes, figuras petrificadas con taxidermia o en reproducciones de fibra de vidrio su gesto es atrapado en ese disparar de la cámara como quien va de cacería, acentuando la contradicción del hábitat en la que encuentra a sus modelos.
bottom of page